• Buscar

Caras y Caretas

           

Día de la militancia

Se celebra los 17 de noviembre como recordatorio a la fecha del primer regreso a la Argentina del general Juan Domingo Perón tras 17 años de exilio.

1955, bombardeo a Plaza de Mayo, renuncia de Perón, “Revolución Libertadora”, proscripción. Exilio en España, luego de Paraguay, Panamá, Nicaragua, Venezuela y República Dominicana. Después de 17 años, el general Juan Domingo Perón prepara su regreso a la Argentina.

El presidente de facto Alejandro Agustín Lanusse había anunciado que levantaba la proscripción. «No voy a admitir que corran más a ningún argentino diciendo que Perón no viene porque no puede”, desafió al líder del peronismo. La respuesta llegó en la voz de Héctor Cámpora, quien a mediados de agosto de 1972, prometió el regreso de Perón antes de las Fiestas. Pronto se hizo pública una solicitada del general publicada el 7 de noviembre: «A pesar de mis años, un mandato interior de mi conciencia me impulsa a tomar la decisión de volver, con la mejor buena voluntad, sin rencores –que en mí no han sido habituales– y con la firme decisión de servir, si ello es posible».

Un día antes de la fecha de retorno, los militares rodearon el aeropuerto internacional de Ezeiza a fin de que fijar una distancia entre el político y los militantes. A pesar de estas medidas y de la lluvia que cubrió el día, miles de mujeres y hombres se hicieron presentes.
El 17 de noviembre de 1972 a las 11.20 toco tierra el DC-8 de Alitalia que traía a Perón, quien viajó rodeado por 22 presidentes distritales del Partido Justicialista y otro centenar y medio de acompañantes, entre los que se encontraban representantes de la CGT, de las 62 Organizaciones, ex funcionarios y legisladores, empresarios, miembros retirados de las Fuerzas Armadas, científicos, religiosos, artistas y deportistas. Uno de ellos fue el secretario general de la CGT, José Ignacio Rucci, quien le sostuvo el paraguas en la foto que inmortalizó aquel momento. Sin embargo, recién podría radicarse en el país al año siguiente, bajo la presidencia de Héctor J. Cámpora.

Millones de argentinos se movilizaron para recibirlo bajo una persistente lluvia y luego fueron a vitorearlo a su domicilio de Gaspar Campos durante días enteros. Con la impotencia por la derrota que significó su llegada, el gobierno de Lanusse retuvo a Perón en el Hotel de Ezeiza hasta la madrugada del día siguiente, cuando decidió liberarlo y pudo dirigirse a la casa de Vicente López. Permaneció en Buenos Aires solo 29 días y volvió a irse a España, de donde retornó definitivamente el 20 de junio de 1973, de la mano del presidente justicialista electo Héctor Cámpora, quien luego renunciaría a su cargo para llamar a elecciones y permitirle a Perón acceder a su tercera y última Presidencia.

El 17 de noviembre, en la que es considerada una de las movilizaciones más grandes de la historia argentina, una marea humana se movilizó para recibir a su líder. Bajo la lluvia, se lanzó a las calles para intentar llegar a Ezeiza. Treinta y cinco mil soldados del ejército, apoyados por la policía, cercaron el aeropuerto e hicieron imposible la llegada de los militantes. Pero nunca pudieron impedir el contacto entre Perón y su pueblo. Desde entonces, los peronistas consideran ese día como el día del militante

Escrito por
Fernando Amato
Ver todos los artículos
Escrito por Fernando Amato

%d