La cantautora chilena despliega en su quinto disco de estudio un festival de canciones pop ochentosas, sostenidas en una electrónica retro, con percusión y saxos en las mismas coordenadas. Su voz asume un primerísimo primer plano para desgranar melodías gancheras e historias de encuentros, desencuentros y hedonismo. “La isla de Lesbos”, “Eclipse total” y “Diva” –junto a Chico Blanco– se destacan en un disco que dejará conformes a sus fans.
Nocturna / Javier Mena
