El autor de “El Aleph” se definía, ante todo, como un lector. Y los libros que atesoraba dan cuenta de ello. Porque leer, para él, era el camino a la felicidad personal.
El autor de “El Aleph” se definía, ante todo, como un lector. Y los libros que atesoraba dan cuenta de ello. Porque leer, para él, era el camino a la felicidad personal.