Raymond Wilmart llegó a la Argentina en 1872, luego del Congreso de los Trabajadores de La Haya, enviado por Marx. Entonces tenía 22 años. En esta novela, el autor reconstruye su historia, narrada en primera persona ante un interlocutor del que solo sabemos que está interesado en conocer el derrotero de Wilmart, que está a punto de cumplir 85 años y cuyo estado de salud es frágil. A lo largo de cinco encuentros, Wilmart le contará a su entrevistador las peripecias de su vida y su relación con el proyecto marxista.
“A Carlota la conocí en un ateneo de cultura francesa que funcionaba en la Manzana Jesuítica, en el corazón de la Docta (…) Allí tenía una cita pactada con un camarada, al que no conocía personalmente, para coordinar una reunión con los pocos comuneros dispersos en la ciudad, socios en la tarea de construir eso que usted quiso llamar mañana, como contraseña que pudo haber reemplazado por futuro, y que a mí ya me resultaba un desafío bastante cuesta arriba”, cuenta el enviado de Marx en el primer encuentro con su entrevistador.
Soplar sobre cenizas reconstruye la historia de la primera recepción de El capital en la Argentina, al tiempo que da cuenta de las transformaciones de Buenos Aires de gran aldea a metrópoli, y de los mandatos, la violencia, la juventud, la vejez y, sobre todo, de los sueños colectivos.