“Tres meses antes de que mi padre muriera, empecé a llevarme cosas de su casa”, arranca Lisa Brennan-Jobs este relato, amoroso y descarnado, sobre la relación con su padre, Steve Jobs, que tardó años en reconocerla. “Había renunciado a la posibilidad de una reconciliación a lo grande, como en las películas.”
Mínimos peces / LISA BRENNAN-JOBS
